Cómo hacer el divorcio express cuando IGNORO EL DOMICILIO de mi ex cónyuge
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El nuevo "divorcio express" permite obtener el divorcio aun en contra de la voluntad del cónyuge, sin condiciones ni requisitos más que la voluntad de divorciarse.
Sin embargo, sigue siendo un proceso judicial en el que hay que NOTIFICAR al ex cónyuge de la petición de divorcio. Aunque nada de lo que diga, u omita decir el demandado impedirá el divorcio, sigue siendo ineludible este paso.
Pero no son pocos los casos en los que se ignora el domicilio del cónyuge. Ocurre que una pareja distanciada hace muchos años puede desconocer por completo el paradero de su ex. Puede haberse mudado a otro país, o incluso haber muerto (cuando esto es una hipótesis probable, conviene evacuar en lo posible esta duda primero, ya que lógicamente, eso tornaría abstracta la petición de divorcio).
En esos casos, lo primero que conviene hacer es agotar las formas que pueda tener el interesado para ubicarlo: por ej. a través de parientes o amigos en común. Aunque el ex cónyuge no desee colaborar, contar con esa información permitiría probablemente acelerar, en parte, el proceso de notificación, "bajo responsabilidad" del cónyuge que peticiona el divorcio. Es decir, el cónyuge puede asumir la responsabilidad de notificar en un domicilio donde afirma que le consta que reside el ex cónyuge. A veces, incluso la casa de los padres, por ej., suele ser un domicilio que sirve a estos efectos, cuando se tiene conocimiento de que allí se mudó luego de la separación, y consta, por ej., en una constancia de inscripción en la AFIP (se puede consultar fácilmente online). En general, esto da resultado y resuelve bastante prácticamente esta cuestión.
Hay personas que proporcionan un domicilio de su ex que en realidad es de un conocido que accede a recibir la notificación y contestar al notificador que la persona vive allí. Esto no está bien, pero, sobre todo cuando no hay otra cosa que discutir, como bienes o menores (aunque aun en estos casos, el silencio no perjudica al demandado que no pudo contestar, en realidad), si el cónyuge luego se entera de que está divorciado, la verdad es que no podría plantear una nulidad, ya que al no poder hacer nada para oponerse, su imposibilidad de contestar no le habría acarreado ningún perjuicio.
Cuando no hay ningún dato, hay que librar una cantidad de oficios (pedidos de informes) suficiente para tratar de obtener información acerca de cuál es el último domicilio registrado por el cónyuge. Se trata de registros públicos como el Registro Nacional de las Personas, Registro Electoral (suele ser la mejor opción, según dónde votó por última vez, para notificar bajo responsabilidad de la parte actora), Anses-Afip, Policía Federal Argentina (o Policía local, según la provincia), y eventualmente, en Migraciones (para ver si salió del país, lo cual realmente complica la notificación).
El plazo para responder esos oficios es de 20 días hábiles. Es habitual que se retrasen y haya que reiterarlos.
La consecuencia es que se dilata mucho la duración del juicio de divorcio, que -como se ve- dista de ser un trámite tan "express" en estos casos.
Una vez contestados esos pedidos, hay que intentar la notificación a los domicilios informados por los Organismos requeridos: lo más común es que estén desactualizados. Y si resulta (por un informe o porque quien recibe una cédula así lo informa, por ej.) que el cónyuge mudó su residencia a otro país, es mucho peor. Hay que notificar por exhorto diplomático, según el país, con traducción pública mediante. Lleva muchos meses, y resulta bastante costoso.
Si no se puede notificar en esos domicilios, hay que pedir citación por edictos, en el boletín oficial y en un diario de gran circulación. A veces se ordena edictos en un diario de menor circulación, como algo más económico, pero resulta más caro que otros de mayor circulación. A veces, se puede lograr, con un presupuesto comparativo, publicarlo en el diario más conveniente. Pero igualmente, aun en el diario más barato, todo esto suma unos miles de pesos de gastos y meses de trámite.
En estos casos, es casi seguro que nadie contestará la citación por edicto. Pero al fin se podrá avanzar hacia la sentencia. Mucho tiempo después del inicio del trámite "express", y con costos mucho mayores que el de un trámite simple, como lo es en general el juicio de divorcio actual.